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¿Qué es exactamente el Síndrome de Diógenes?

Pequeñas señales que no debes ignorar.

El Síndrome de Diógenes es un trastorno de conducta caracterizado por el aislamiento social, el abandono personal y del entorno, y una tendencia patológica a acumular objetos, basura o cosas sin valor aparente. Afecta principalmente a personas mayores, aunque no exclusivamente.

Lo más complejo es que quienes lo padecen no suelen ser conscientes del problema. Y ahí es donde las personas cercanas —familia, vecinos o cuidadores— jugamos un papel fundamental.

Señales tempranas: cómo empieza todo

Muchas veces los síntomas empiezan siendo muy sutiles:

“Cuando llegó la pandemia, que no podíamos salir de casa para nada que no fuera estrictamente necesario, una de mis 'mayores' salía al contenedor de basura y se traía para la casa tódo lo que pillaba, iba 30 veces al día si la dejaban…”

Ese tipo de comportamiento —que podría parecer anecdótico o incluso "curioso"— es un claro signo de alerta. Porque la persona comienza a justificar lo injustificable: guardar restos, almacenar basura, aferrarse a lo inútil.

¿Por qué se da sobre todo en personas mayores?

El envejecimiento, la soledad, el deterioro cognitivo o traumas acumulados pueden dar lugar a este tipo de trastornos. No es raro que aparezca tras una pérdida, una jubilación o un cambio de rutina. En muchos casos, la persona lleva años lidiando con emociones no resueltas, y el entorno desordenado refleja ese caos interno.

“…estaba empezando claramente a tener este síndrome y era muy complicado de tratar ya que ella no consideraba que tuviera un problema…”

Este es uno de los grandes retos del síndrome: la negación. La persona afectada no acepta ayuda, y muchas veces ni siquiera permite que se le mencione que algo anda mal.

¿Cómo actuar si sospechas que un familiar está acumulando compulsivamente?

Habla con cuidado. No acuses ni critiques. Utiliza frases como: “Me preocupa cómo te estás sintiendo últimamente”, o “¿Te gustaría que te eche una mano con la casa?”

Observa el entorno. No basta con una visita rápida. Fíjate en rincones, olores, acumulación de objetos, papeles, restos de comida, ropa apilada.

Involucra a otros familiares o profesionales. Cuanto antes se actúe, mejor. No esperes a que la situación se descontrole.

¿Y qué pasa con la limpieza del hogar?

Una vez que se aborda el aspecto psicológico, queda otro frente igual de importante: la recuperación del espacio físico.

Las viviendas afectadas por este síndrome suelen estar en condiciones extremas:

✅ Limpieza profunda y retirada de residuos.

✅ Desinfección completa.

✅ Discreción y profesionalidad.

✅ Asesoramiento con profesionales especializados si lo necesitas.

Llámanos. Podemos ayudarte a recuperar tu hogar. 💚